Moving to Colorado

If you would have told me a year ago that I would be in Colorado, I would have spat my coffee out and thought you were crazy. Truth is, I had a good job and set roots for the past 30 + years in Pittsburgh. Well, here I am. It’s June 4th, 2019 and I now live in the great state of Colorado. The move wasn’t easy by any means. Picture a Budget truck full of furniture, three kids (one of which drove one of our vehicles), five dogs and two cats. We made the trip in three- and one-half days. I must admit, this tested my patience and especially so since the move was in the middle of winter. Driving through Missouri, Kansas, and Colorado during the peak of snow season is not for the faint of heart. There were times during our Kansas journey that I honestly though we were done for. I’ve never seen wind and snow of that magnitude. That said, I am so happy we made the move. It has been a dream for my wife and I to live in the mountains for some time. For her, it was a sort of homecoming given that she grew up in Colorado. For me, it was an entirely new experience. I love it here so far. What’s not to love? Beautiful scenery everywhere you look, outdoor activities all 4 seasons, fresh and clean dry air, most people you meet speak Spanish, we have Spanish radio stations, Mexican food anytime I want, and I get to raise my kids in my home culture. I feel so blessed to live in the mountains of Glenwood Springs. We had to make a lot of sacrifices to make it happen and I am extremely glad that we did. I can’t wait to explore every corner of this beautiful state!

Si me hubieras dicho hace un año que estaría en Colorado, habría escupido mi café y pensar que estabas loco. La verdad es que en Pittsburgh tenía un buen trabajo e hice raíces los últimos 30 años. Bueno, aquí estoy. Es el 4 de junio de 2019 y ahora vivo en el gran estado de Colorado. La mudanza no fue fácil de ninguna manera. Imagínate conducir un camión de Budget lleno de muebles, tres niños (uno de los cuales condujo uno de nuestros vehículos), cinco perros y dos gatos. Hicimos el viaje en tres días y medio. Debo admitir que esto puso a prueba mi paciencia y sobre todo porque la mudanza fue en pleno invierno. Conducir a través de Missouri, Kansas y Colorado durante el pico de la temporada de nieve no es para los débiles de corazón. Hubo momentos durante nuestro viaje en Kansas que, honestamente, pensé que nos íbamos a quedar congelados. Nunca he visto viento y nieve de esa magnitud. Dicho esto, estoy tan feliz que nos mudamos. Ha sido un sueño para mi esposa y para mí vivir en las montañas por mucho tiempo. Para ella, fue una especie de regreso a casa porque ella creció en Colorado. Para mí, fue una experiencia completamente nueva. Me encanta estar aquí ahora. ¿Qué no se podría amar? Hermosos paisajes por todos lados, actividades al aire libre en las 4 estaciones, aire fresco y limpio, la mayoría de las personas que conoces hablan español, tenemos estaciones de radio en español, comida mexicana cuando quiero, y puedo educar a mis hijos en mi cultura hogareña. Me siento bendecido de vivir en las montañas de Glenwood Springs. Tuvimos que hacer muchos sacrificios para que esto sucediera y estoy muy contento de haberlo hecho. ¡Estoy muy emocionado de explorar cada rincón de este hermoso estado!